«Ha sido un estrés brutal», confiesa. Diego González Rivas ha dado varias vueltas al mundo, operando en 131 países y practicado cerca de 9.000 videocirugías de pulmón con su técnica mínimamente invasiva uniportal VATS, que permite intervenir al paciente por una exigua incisión de tres centímetros. Ha realizado cirugías en el límite de lo posible —cuando no lo ha traspasado— y, en no pocos casos, en condiciones extremas. Pero nunca se había enfrentado a un reto semejante al que se encontró esta semana en Sierra Leona, el país elegido, junto con Liberia, para estrenar la actividad en el extranjero de la fundación que lleva su nombre, constituida hace unos meses para facilitar intervenciones en personas con pocos recursos.